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La imagen, claramente, grafica la realidad que muchas mujeres viven en el ámbito laboral; es decir, no dejan de realizar el rol socialmente asignado por su condición de mujer: El de cuidado. Esto implica una doble jornada laboral para la mayoría de las mujeres trabajadoras, lo que tambien implica menos horas para descansar, estudiar o disfrutar; siendo aún más perjudicadas quienes cuentan con menos recursos económicos. Por otra parte, el dibujo expresamente la diferencia con el hombre; que se encuentra al lado, pero sólo cumpliendo con su rol labora.
1- Para lograr la equidad de género en la sociedad, es necesario discriminar a los hombres.
Esto es falso, no es cuestión de discriminar sino de igualar derechos.
2- El género es lo mismo que el sexo.
No, no es lo mismo. Cuando hablamos de género nos referimos a a los aspectos socialmente atribuidos a un individuo, diferenciando lo masculino de lo femenino, en base a sus características biológicas. Es decir que es lo que las sociedades esperan que piense, sienta y actúe alguien por ser varón o por ser mujer. Por ejemplo, se dice que “los hombres no lloran” o que “a las mujeres les gusta la ropa”. Así, el género condiciona los roles, las posibilidades, las acciones, el aspecto físico y la expresión de la sexualidad de las personas. Es el género una construccion social y cultural que puede corresponder o no al sexo biológico.
Cuando nos referimos a la identidad de género estamos hablando de la forma en que cada persona siente su género. Por eso, puede corresponder o no con el sexo asignado al nacer. Es decir que es el género que cada persona siente, independientemente de que haya nacido hombre o mujer. Una persona que nació hombre puede sentir que su identidad de género es femenina y viceversa . Es la vivencia del género tal como la persona la siente; puede corresponder o no con el sexo biologico.
Por otra parte, el sexo biológico es el conjunto de características biológicas (pene, vagina, hormonas, etc) que determinan lo que es un hombre o una mujer en la especie humana. Al nacer, a las personas se les asigna un sexo de acuerdo a estas características. No siempre se corresponde con el género autopersibido.Partiendo de la división de género binaria, en orden a la respuesta de lo que la sociedad espera, podríamos ordenar las características de la siguiente manera.
Género masculino:
-Activo – Racional – Cuidador – Proveedor
La justificación de la elección se funda, por ejemplo, en la asignación de roles dentro de la cultura patriarcal; en la cual el hombre debe obedecer los mandatos sociales atribuidos desde ese posicionamiento: Activo, estereotipo del mandato sexista que corresponde a la “heteronorma”; Ser racional, es decir, no actuar bajo emociones;( “eso es de mujeres”); Cuidador, “en su calidad de ser fuerte y que debe proteger al sexo opuesto: débil por naturaleza”; Proveedor, corresponde al estereotipo del ” macho proveedor, sostén de familia”.
Género femenino:
Activa, en su rol funcional a la heteronorma; Emocional, como signo de un sentimiento no racional, no inteligente; Frágil, como signo de debilidad e inferioridad “natural”; Dependiente, como característica “natural” y muestra de su “inferioridad”; Proveedora, en su rol de “reproductora”.
P.D: Reseño que esta “división” sólo es considerada en respuesta a la consigna y en función de una respuesta a los mandatos sociales y la asignación de roles enmarcados en una sociedad PATRIARCAL.La publicidad denota la existencia de dos géneros, el binarismo propuesto y reconocido dentro de la cultura patriarcal. No me parece que el mundo esté dividido efectivamente entre varones y mujeres, si bien el mundo está, pretendidamente, “dividido por múltiples fronteras” de carácter ideológico, cultural, etc., desde una perspectiva de género la “división” entre varones y mujeres deja afuera a muchísimas personas que no se auto perciben dentro de estas categorías.
La publicidad puesta en reflexión caracteriza la resistencia a los procesos al cambio, desde una perspectiva de género, reseña el estereotipo del hombre fuerte, autosuficiente, superior. Por otra parte caracteriza a la mujer banalizando su resistencia a la dominación patriarcal; abandonando sus principios y luchas para compartir una cerveza con un hombre.
No me siento identificado con ninguna de estas características; aunque reconozco haber sido formado bajo estereotipos compatibles con el hombre fuerte, autosuficiente, etc.; creo que ha sido, sustancial, mi tránsito por ámbitos educativos universitarios y espacios de militancia política, para la deconstrucción de la cultura machista.
Feminismo y machismo no creo que configuren expresiones que signifiquen opuestos, ni que puedan ser equiparables. Esta respuesta encuentra su fundamento sustancial en el hecho de que mientras el machismo, como actitud, significa la prepotencia de los varones respecto de las mujeres; el feminismo, configura, las veces, el principio de igualdad de derechos y el movimiento que lucha por la realización de esa igualdad.Buenos días a todes!! mi nombre es Mariano Boccazzi, soy parte del equipo de la Dirección de DDHH y docente en la escuela secundaria N°2 de Pje. Pavón. He cursado talleres sobre género en la UNLP, como estudiante de la carrera de Comunicación Social. Es un gusto participar en este espacio; para seguir adquiriendo herramientas, recuperar conceptos y compartir miradas del mundo para continuar deconstruyendo la cultura patriarcal.
